Efectividad de la vuelta a la calma en el entrenamiento
La vuelta a la calma es un conjunto de actividades o intervenciones que se realizan durante la parte final de las sesiones de entrenamiento que se llevan a cabo en la gran mayoría de los programas de entrenamiento.
Los objetivos fundamentales que se plantean con esta última parte de los entrenamientos es promover la recuperación psicológica y fisiológica después del ejercicio para que los deportistas puedan recuperar mejorar para otras sesiones de entrenamiento, competiciones e incluso reducir el riesgo de padecer una lesión.
En Estados Unidos el 89% de los entrenadores recomiendan llevar a cabo una vuelta a la calma al final del entrenamiento y el 53% recomiendan un trote suave. La duración media de la vuelta a la calma dura entre 5 y 15 minutos y suelen incluir actividades de baja intensidad como nadar, algún ejercicio de fuerza, pedaleo en bicicleta a baja intensidad o incluso la ejecución de ejercicios de flexibilidad.
En la figura siguiente podemos ver las intervenciones y los efectos psicológicos y fisiológicos atribuidos a la vuelta a la calma.

Sin embargo, ¿realmente la vuelta a la calma es efectiva?
En una revisión llevada a cabo por Hooren y Peake (2018) se analizaron diversos estudios sobre la recuperación llevada a cabo a través de diferentes protocolos de vuelta a la calma y su efecto en la recuperación y rendimiento durante el mismo día y el día después.
En la siguiente tabla podemos ver los diferentes efectos de los estudios en diferentes parámetros:

A la vista de los resultados parece ser que una recuperación activa induce mayores beneficios para la recuperación en comparación con la recuperación pasiva pero no existen pruebas científicas concluyentes de que existan grandes beneficios con la realización de vuelta a la calma.
Sin embargo, cabe destacar que analizando los estudios llevados a cabo, la mayoría han llevado a cabo sus investigaciones con personas sedentarias o deportistas amateur/recreacionales por lo que se sugiere llevar a cabo investigaciones que profundicen más en los efectos de la recuperación activa en personas deportistas o que lleven a cabo entrenamientos con elevadas cargas.
Van Hooren, B., Peake, J.M. Do We Need a Cool-Down After Exercise? A Narrative Review of the Psychophysiological Effects and the Effects on Performance, Injuries and the Long-Term Adaptive Response. Sports Med 48, 1575–1595 (2018).